Hoy conmemoramos la muerte del beato Guillermo José Chaminade. Por ello, publico una de las páginas del calendario de 1950 que se entregaba a los alumnos del colegio y que con motivo del primer centenario de su fallecimiento, recordaba cómo fueron los últimos días del beato:

Página del calendario del año 1950 con motivo del primer centenario de la muerte del beato Chaminade.
Página del calendario del año 1950 con motivo del primer centenario de la muerte del beato Chaminade.

MUERTE DEL P. CHAMINADE


El domingo, 6 de enero de 1850, por la tarde, mientras se hacía leer unos pasajes de la Historia de la Iglesia, le sobrevino un ataque de apoplejía que le paralizó el lado derecho y le privó del uso de la palabra, aunque dejándole plena lucidez de espíritu. Todos sus hijos acudieron a su lado. Como no podía hacerse entender sino por signos, lo hizo de una manera muy expresiva, manifestando su gran gozo de verlos a todos reunidos en torno suyo. Se le administraron los últimos Sacramentos. Luego, se produjo una leve mejoría y su vida se prolongó todavía quince dias.

Muchas personas acudían a su lado para recibir su última bendición. Uno de los visitantes fué el mismo señor Arzobispo.

La vida se le iba gota a gota, y el paciente conservó hasta el último momento el uso de sus facultades. La agonía comenzó el dia 22, hacia las tres de la tarde. El Buen Padre tomó con sus manos temblorosas el crucifijo y lo besó con efusión. Hizo otro esfuerzo para repetir ese acto de fe y de amor, pero sus manos cayeron sobre el pecho apretando la cruz hasta el instante en que entregó su alma al Creador. Los religiosos que rodeaban su lecho acababan de rezar las oraciones de los agonizantes. Eran las cuatro de la tarde del 22 de enero de 1850.